Muchas veces deseamos hacer un menú para varias personas y quisiéramos incluir pasta, pero como la pasta se tiene que hacer al momento (para que no pierda su sabor y textura), esto podría estresar un poquito.
Ahora bien, te doy una alternativa. Cuando tengas que hacer pasta con antelación, te sugiero, pongas un recipiente lleno de agua, sal y una cucharada de aceite, y una vez que hierva sueltas la pasta en el agua, déjala en un punto antes del "dente", es decir "más durita", sácala inmediatamente de la cocción y colócala en otro recipiente frío (para que corte la cocción), una vez realizado este proceso, incorpora de 2 a 3 cucharadas de aceite de oliva y revuelve con las manos. Con esto, la pasta no se pegará y podrás terminar la cocción al día siguiente, sin ningún problema. Es importante que la pasta que vayas a cocinar quede un punto antes del "dente" de lo contrario, la cocción se sobrepasará.
Reserva tu pasta en el refrigerador con un film y sácala una hora antes de cocinar nuevamente.
Ejemplo: Si la pasta que vayas a utilizar (comercial) te indica que la retires a las 8 minutos para que esté al "dente", retira la pasta a los 6 minutos y haz el proceso del aceite de oliva.
Al día siguiente, una vez que hirvió tu agua, vuélvela a cocer por un término de 2 a 3 minutos más.
Es importante que estés al pendiente de la pasta para que esté en su punto. ¡Fuera Estrés!
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